Reporte de Sostenibilidad 2022
Mensaje del Presidente y Gerente General de Antamina
A la comunidad de Antamina, a la población de nuestra área de influencia operativa, a nuestros aliados estratégicos y a nuestros colaboradores:
Es un placer presentarles nuestro Reporte de Sostenibilidad 2022 y espero que, al momento de leerlo, tanto ustedes como sus familias gocen de buena salud y bienestar.
Este documento tiene como finalidad mostrar el desempeño de Compañía Minera Antamina S.A. a lo largo de 2022, pero antes es importante situarnos en el contexto gremial empresarial. La minería es una actividad clave para la economía del Perú, pues dinamiza y descentraliza el crecimiento económico y la recaudación fiscal, genera divisas que garantizan estabilidad cambiaria y monetaria, y crea empleos formales con protección social que reducen la vulnerabilidad económica de las familias. El sector minero equivale al 15 % del Producto Bruto Interno; además, en 2022, la recaudación fiscal proveniente del rubro minero fue de S/ 15,848 millones (cerca del 10 % de la recaudación fiscal total), las exportaciones del sector alcanzaron los US$ 37,711 millones (el 57 % de las exportaciones totales) y se generaron 240 mil puestos de empleo directo.
Para que estos auspiciosos índices se mantengan, y para que la minería siga constituyéndose como un motor de desarrollo, es imperativo que los territorios donde esta actividad opera cuenten con una institucionalidad pública y privada sólida que permita pensar en un futuro sostenible. Y esa es una meta compartida por el sector empresarial, el Estado y las comunidades en su conjunto.
En los 22 años transcurridos desde que iniciamos el proceso de extracción de minerales a tajo abierto, tanto la empresa como la región donde operamos han percibido cambios importantes para estos objetivos comunes. En 2022, Antamina logró la producción del 19.2 % del cobre obtenido en el país, así como el 36.7 % de la producción de zinc y el 16.4 % de plata, consolidándose como una de las empresas líderes del sector minero.
A su vez, la región Áncash, donde se concentra nuestra operación, ha registrado un proceso sostenido de progreso económico y social. El pago de US$ 12,112 millones en tributos y aportes al Estado, realizado por nuestra compañía durante estas dos décadas, además de los S/ 2,867 millones recibidos por transferencia económica de recursos generados por la minería, han permitido que las autoridades ancashinas ejecuten obras públicas que ayuden al cierre progresivo de brechas y que, al mismo tiempo, generen empleos que deriven en una mejor calidad de vida. Este círculo virtuoso ha llevado a que el índice de Desarrollo Humano (IDH), calculado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), se haya incrementado en 50 % en los últimos 18 años, y que más de 30 mil ancashinos que residen en el área de influencia operativa de la empresa hayan salido de la pobreza.
Las transferencias por concepto de canon minero a las regiones alcanzaron en 2022 la cifra récord de S/ 7,844 millones, y las regalías mineras ascendieron a S/ 2,806 millones en el mismo período. Las estadísticas ubican a Áncash como la región que lideró el ránking de recursos distribuidos, con el 26.2 % del total. Ha sido grato conocer que, al cierre del año, se mantuvo en el tercer lugar en cuanto a inversión ejecutada a nivel de Gobiernos Regionales, con un monto superior a los US$ 506 millones. Destacan la ejecución de proyectos orientados al cierre de brechas en servicios básicos (mejoramiento del saneamiento en diversas provincias), a la actividad agrícola (canales de regadío y sistemas de riego tecnificado), al rubro de infraestructura (ampliación de vías y accesos) y al sector educación (equipamiento de colegios), entre otros.
Para nuestra empresa, estas cifras positivas confirman que las alianzas estratégicas con el Estado, las comunidades y la cadena de proveedores son indispensables para generar desarrollo en el territorio.
En lo que respecta a nuestra estrategia de gestión social, esta se centra en cinco pilares fundamentales: i) promover la institucionalidad madura, a través de nuestros proyectos de asistencia técnica y fortalecimiento de capacidades de autoridades públicas locales y regionales; ii) generar oportunidades y espacios para las generaciones futuras, a través de los proyectos Beca Más Progreso, Más Educación, Efecto Áncash y Wiñantsik; iii) contribuir al cierre de brechas de infraestructura social y productiva, mediante obras de impacto como la construcción de hospitales en Huarmey, Huari y Llata, o la construcción del desembarcadero para pescadores artesanales de Huarmey; iv) propiciar el emprendimiento local y el desarrollo económico, con iniciativas como la creación de una cadena de valor para la papa en la cuenca de Ayash y la cadena de valor del sector pecuario en Huallanca, o el impulso del cultivo de palta en Valle Fortaleza y el desarrollo de la agroexportación en los valles de Huarmey; y v) invertir en labores de prevención ante emergencias y desastres, como el reforzamiento en zonas de riesgo ante lluvias e inundaciones, el fortalecimiento de la respuesta sanitaria local y el apoyo sostenido en las campañas de salud contra el COVID-19, el dengue y otras enfermedades.
Esta estrategia, como se puede ver, está pensada para el largo plazo porque incorpora el componente de la sostenibilidad, al proveer de herramientas tanto al sector económico local como a los líderes políticos que llevan las riendas del desarrollo de la región.
Por otro lado, a través de mecanismos como el de Obras por Impuestos (OXI) nos comprometimos a impulsar importantes proyectos de infraestructura social en nuestra área de influencia operativa. En los últimos años hemos firmado 67 convenios con diversas entidades subnacionales y, al culminar 2022, el monto comprometido alcanzaba S/ 1,742.5 millones.
Tan importante como la generación de los proyectos y su puesta en marcha es el acompañamiento y la asistencia técnica que nuestra compañía brinda a las autoridades en todas las etapas del proceso, desde la planificación de los proyectos hasta su ejecución y la posterior operación y mantenimiento. De esta manera ayudamos a acelerar el cierre de brechas y contribuimos a la mejora de la capacidad de gestión de los funcionarios públicos y las instituciones que estos encabezan. En paralelo, estimulamos y reforzamos los componentes para lograr tener un tejido empresarial local sólido y sostenible. De esta manera, Antamina se consolida como un socio para el desarrollo de Áncash.
Otro eje importante para la empresa es el cuidado del medio ambiente y el cumplimiento de los estándares de calidad de agua y aire exigidos por el Estado Peruano. Bajo esa lógica, realizamos monitoreos regulares con la participación de las comunidades locales e instituciones a cargo. En este esfuerzo constante hemos logrado que el 100 % del agua utilizada en nuestras operaciones provenga de fuentes superficiales captadas de la lluvia, para no afectar el acceso de la población a este recurso vital. También monitoreamos continuamente la calidad del aire y las emisiones de material particulado con el fin de controlarlo y mitigar su efecto alrededor de nuestra operación. Teniendo como punto de partida que la sostenibilidad ambiental es clave para la industria minera, utilizamos la huella de carbono como principal indicador para determinar nuestro desempeño en la gestión estratégica para contrarrestar el cambio climático.
Cabe indicar que, al momento de presentar este reporte, nos encontramos en pleno proceso de gestión de una Modificación del Estudio de Impacto Ambiental (MEIA). Su aprobación por parte del Estado nos permitirá trabajar en la ampliación de la vida útil de la operación hasta el año 2036 con una inversión aproximada de US$ 2,000 millones, manteniendo estándares de excelencia operacional y asegurando una gestión socioambiental responsable y sostenible.
Pero Antamina no solo concentra sus esfuerzos de manera externa en el ámbito social donde se desenvuelve la operación, sino también a nivel interno, en el día a día de sus colaboradores. Prevenir, minimizar y controlar los riesgos en el trabajo llevaron a que, en 2022, el Índice de Frecuencia de Accidentes Registrables (IFAR) y el Índice de Severidad de Accidentes Registrables (ISAR) mejoraran respecto al año previo. Al mismo tiempo, desplegamos un programa de actividades e indicadores para la medición del liderazgo visible en materia de seguridad, que sentó las bases para el relanzamiento de la estrategia de la cultura preventiva.
En Antamina priorizamos una cultura laboral cuyos valores esenciales son la salud y la seguridad de cada uno de nuestros colaboradores, pero también nos esforzamos en mantener una política de inclusión e igualdad de oportunidades. Al cierre del año 2022, el 41 % de nuestra planilla provenía de Áncash y el 10 % estaba compuesto por mujeres, incluyendo altos cargos directivos. Aumentar progresivamente la presencia femenina es un compromiso que la compañía asume con entusiasmo y responsabilidad.
Todo lo expresado resume diversos componentes que muestran el desempeño de Antamina. Los invito a revisar los siguientes capítulos de nuestro Reporte de Sostenibilidad, donde explicaremos a detalle estos y otros logros obtenidos durante el año 2022.
Víctor Gobitz Colchado
Presidente – Gerente General (CEO)
Compañía Minera Antamina S.A.